Ubicado en las afueras de la ciudad, el Castillo Guerrero es uno de los secretos mejor guardados de San Vicente y una parada infaltable para quienes disfrutan del turismo histórico y arquitectónico.
Construido en el siglo XIX, este castillo de estilo neogótico fue la residencia de la poderosa familia Guerrero, una de las más influyentes de la región en aquella época. La estructura imponente, con torres y detalles ornamentales, recuerda a los castillos europeos y contrasta con el paisaje rural que lo rodea.
Una historia marcada por el misterio
Más allá de su valor arquitectónico, el castillo es protagonista de una de las leyendas más conocidas de Buenos Aires: la trágica historia de Felicitas Guerrero, una joven de la alta sociedad porteña cuyo destino quedó marcado por un crimen pasional. Felicitas, que vivió a mediados del siglo XIX, fue víctima de un asesinato que aún hoy genera relatos y versiones diversas.

Si bien algunos historiadores debaten si Felicitas llegó a residir efectivamente en el castillo, su nombre está íntimamente ligado a la propiedad y a la memoria colectiva de la región. El lugar, además, alberga relatos sobre túneles ocultos y objetos históricos que alimentan su aire de misterio.
Un paseo por el pasado
Hoy, el Castillo Guerrero se puede visitar en el marco de circuitos guiados donde se narra tanto la historia oficial como las anécdotas familiares menos conocidas. Es un sitio ideal para quienes aman explorar lugares cargados de simbolismo, arquitectura y relatos de época.
Si te queda tiempo después de recorrer el castillo, podés acercarte a la Reserva Natural Lagunas de San Vicente para disfrutar de un entorno natural único o visitar la Parroquia San Vicente Ferrer, que también es parte del patrimonio histórico local.
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Fuentes: